Hoy en Nuevas Cada Mañana, nos acompañó el Pastor Juan Carlos Campos para conversar sobre la importancia del rol paterno en la familia, poniendo énfasis en la relación de enseñanza y provisión con los hijos.

En la ocasión, el siervo de Dios destacó la relevancia de conservar los valores cristianos en la familia, en desmedro de las enseñanzas del mundo. “Un hogar que tiene a Cristo debería tener un compromiso de orden familiar distinto. El tema social trata de desvalorizar los principios de disciplina, corrección y la importancia de estos en la formación, pero estar con Dios permite tener mejores hijos y mejores padres”.  

También destacó las enseñanzas de la Biblia respecto de este tema: “En el antiguo testamento tenemos ejemplos que nos permiten entender la visión familiar en textos actuales. En el libro de Deuteronomio esta era determinante. Los padres enseñaban a sus hijos respecto de las escrituras. Hoy vivimos en una cultura que valora más la emocionalidad”.

“Como papás, el enseñar la palabra a nuestros hijos es determinantes. En Proverbios 22:6 dice: “Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo él no se apartará. Este es el valor de que si somos instruidos en Sus principios, tendremos muchas posibilidades de que tengamos una conducta adecuada para el resto de los días, pero es algo que debe ser permanente”.

Sobre la autoridad e imagen del padre, el Pastor dijo que “los niños ven cuando una autoridad viene por parte del Señor, y de lo que miran aprenden. El modelo nuestro es determinante para los más pequeños, donde una conducta vale más que mil palabras, y si estas no son las mejores, el hecho de que la enseñanza tenga eco será más complejo”.

Para finalizar, el Pastor hizo énfasis en la importancia de las experiencias como padres e hijos, contando un testimonio personal: “Me compartió cosas que me provocaron un efecto emocional tremendo. Hay atadura que traemos y que todos experimentamos”.

“Yo era un niño herido, dañado, y no porque mi papá habría sido malo, pero el modelo de enseñanza que el heredó me hicieron daño. Pasaron los años, vino Cristo a mi corazón, comencé a desarrollarme como creyente y Dios comenzó a sanarme de todo esto. Yo pude llevar a mi Padre a Cristo y pude valorar una experiencia de acercamiento con él. Una experiencia de restauración”, concluyó.

Lo invitamos a escuchar la conversación completa a continuación:

 

 

 

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