titleRadio Armonia <subtitle type="text">Una señal en el aire, para confesar que: “Jesucristo es el Señor, para Gloria de Dios Padre". Fil. 2:11</subtitle> <link rel="alternate" type="text/html" href="http://radioarmonia.cl"/> <id>http://radioarmonia.cl/inicio/index.php/component/tags/tag/389-divinas</id> <updated>2024-04-29T10:52:32-04:00</updated> <author> <name>Web Radio Armonia</name> <email>internet@armonia.cl</email> </author> <link rel="self" type="application/atom+xml" href="http://radioarmonia.cl/inicio/index.php/component/tags/tag/389-divinas?format=feed&type=atom"/> <entry> <title>Los límites de Dios para la Libertad 2014-06-02T10:08:06-04:00 2014-06-02T10:08:06-04:00 http://radioarmonia.cl/inicio/index.php/component/content/article?id=315:los-limites-de-dios-para-la-libertad Super User <p>¿Son los mandamientos de Dios motivo de ánimo y aliento para usted? ¿Disfruta usted estudiándolos y obedeciéndolos? Por ejemplo, ¿cuándo fue la última vez que meditó seriamente en los Diez Mandamientos?<br /><br />Pero Luis dice usted , ¿quién puede hoy día entusiasmarse con los Diez Mandamientos?<br /><br />Cuando yo era niño, los mandamientos de Dios en especial los Diez Mandamientos eran enseñados de manera tan legalista que evité todo estudio serio sobre ellos hasta cuando terminé mis estudios en una escuela bíblica. Entonces descubrí cuán poco se ha escrito sobre los Diez Mandamientos.<br /><br />Nuestra naturaleza pecaminosa hace que corrompamos lo hermoso. La ley moral de Dios a la que el Apóstol Pablo llamó santa, justa y buena (Romanos 7:12) la convertimos en un legalismo opresivo. Tal vez por eso fruncimos el ceño ante la simple mención de los Diez Mandamientos.<br /><br />Me hacen acordar a mi abuela, que se molestaba sobremanera cuando yo quería salir a jugar los días domingos dirá alguno.<br /><br />El pensar en los mandamientos me recuerda a mi padre, que se negaba a leer el diario del domingo dirá otro.<br /><br />Las palabras de Dios no debieran provocar tales reacciones. Volvamos a la ley moral de Dios y sacudamos las cadenas que hemos creado los seres humanos, tal vez sinceros y bien intencionados pero pecadores al fin, que hemos torcido la belleza de los mandamientos de Dios.<br /><br />Cuando el Señor dio a Israel los Diez Mandamientos, dijo: "Escuchen ustedes, pueblo de Israel, los saqué de la esclavitud no para crear otra esclavitud sino para liberarlos. Si permanecen dentro de los límites que les daré entonces serán libres". <span style="font-size: 12.16px;">Tendrán libertad de acción. De manera que disfruten de todo lo que les he dado."<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Pero la declaración de Dios también incluye una advertencia: "Mientras permanezcan dentro de mis límites, serán libres; pero si tratan de cruzar ese límite, nuevamente estarán en esclavitud."<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Estoy convencido de que esta es la forma en que Dios quiere que consideremos sus mandamientos. El Apóstol Juan nos recuerda: "Sus mandamientos no son gravosos" (1 Juan 5:3). Sus mandamientos son vida.<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Ahora bien, es obvio que no debemos tratar de guardar los Diez Mandamientos para alcanzar la salvación. Todos somos pecadores (Romanos 3:23) y necesitamos un Salvador, Jesucristo (Romanos 5:8). Tanto la Biblia como la experiencia nos enseñan que aunque lo intentáramos, no podríamos guardar los Diez Mandamientos (Romanos 7:1 8:4).<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">El propósito de los mandamientos de Dios no es proporcionar salvación sino poner un fundamento un fundamento sobre el cual podamos ir agregando en nuestras vidas las características de Jesucristo, que vive en nosotros desde que le recibimos en el corazón (Gálatas 2:20; 3:19 29).<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Le aconsejo que pase tiempo meditando en las enseñanzas de Dios. Comience con los Diez Mandamientos en Exodo 20:1 17. Al tiempo que estudia y ora, conteste las siguientes preguntas:<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">En primer lugar, ¿qué revela cada mandamiento en cuanto al carácter de Dios?<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">En segundo lugar, ¿de qué me libera cada mandamiento?<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Tercero, ¿de qué forma me protege cada mandamiento?<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Finalmente, si el amor es el cumplimiento de la ley (Gálatas 5:14), entonces ¿qué es lo que cada mandamiento revela en cuanto al amor?<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Creo que una vez que usted responda estas cuatro preguntas, ya nunca mirará los mandamientos de Dios con una actitud negativa. Si usted los considera desde la perspectiva apropiada, descubrirá principios que aumentarán su entendimiento de su Padre celestial, infinitamente sabio y amante.<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">¿Por qué no hace la prueba?<br /><br /><br /></span><em><span style="font-size: 12.16px;">Luis Palau<br /></span></em><em style="font-size: 12.16px;">Asociación Luis Palau</em></p> <p><br /><br /></p> <p>¿Son los mandamientos de Dios motivo de ánimo y aliento para usted? ¿Disfruta usted estudiándolos y obedeciéndolos? Por ejemplo, ¿cuándo fue la última vez que meditó seriamente en los Diez Mandamientos?<br /><br />Pero Luis dice usted , ¿quién puede hoy día entusiasmarse con los Diez Mandamientos?<br /><br />Cuando yo era niño, los mandamientos de Dios en especial los Diez Mandamientos eran enseñados de manera tan legalista que evité todo estudio serio sobre ellos hasta cuando terminé mis estudios en una escuela bíblica. Entonces descubrí cuán poco se ha escrito sobre los Diez Mandamientos.<br /><br />Nuestra naturaleza pecaminosa hace que corrompamos lo hermoso. La ley moral de Dios a la que el Apóstol Pablo llamó santa, justa y buena (Romanos 7:12) la convertimos en un legalismo opresivo. Tal vez por eso fruncimos el ceño ante la simple mención de los Diez Mandamientos.<br /><br />Me hacen acordar a mi abuela, que se molestaba sobremanera cuando yo quería salir a jugar los días domingos dirá alguno.<br /><br />El pensar en los mandamientos me recuerda a mi padre, que se negaba a leer el diario del domingo dirá otro.<br /><br />Las palabras de Dios no debieran provocar tales reacciones. Volvamos a la ley moral de Dios y sacudamos las cadenas que hemos creado los seres humanos, tal vez sinceros y bien intencionados pero pecadores al fin, que hemos torcido la belleza de los mandamientos de Dios.<br /><br />Cuando el Señor dio a Israel los Diez Mandamientos, dijo: "Escuchen ustedes, pueblo de Israel, los saqué de la esclavitud no para crear otra esclavitud sino para liberarlos. Si permanecen dentro de los límites que les daré entonces serán libres". <span style="font-size: 12.16px;">Tendrán libertad de acción. De manera que disfruten de todo lo que les he dado."<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Pero la declaración de Dios también incluye una advertencia: "Mientras permanezcan dentro de mis límites, serán libres; pero si tratan de cruzar ese límite, nuevamente estarán en esclavitud."<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Estoy convencido de que esta es la forma en que Dios quiere que consideremos sus mandamientos. El Apóstol Juan nos recuerda: "Sus mandamientos no son gravosos" (1 Juan 5:3). Sus mandamientos son vida.<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Ahora bien, es obvio que no debemos tratar de guardar los Diez Mandamientos para alcanzar la salvación. Todos somos pecadores (Romanos 3:23) y necesitamos un Salvador, Jesucristo (Romanos 5:8). Tanto la Biblia como la experiencia nos enseñan que aunque lo intentáramos, no podríamos guardar los Diez Mandamientos (Romanos 7:1 8:4).<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">El propósito de los mandamientos de Dios no es proporcionar salvación sino poner un fundamento un fundamento sobre el cual podamos ir agregando en nuestras vidas las características de Jesucristo, que vive en nosotros desde que le recibimos en el corazón (Gálatas 2:20; 3:19 29).<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Le aconsejo que pase tiempo meditando en las enseñanzas de Dios. Comience con los Diez Mandamientos en Exodo 20:1 17. Al tiempo que estudia y ora, conteste las siguientes preguntas:<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">En primer lugar, ¿qué revela cada mandamiento en cuanto al carácter de Dios?<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">En segundo lugar, ¿de qué me libera cada mandamiento?<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Tercero, ¿de qué forma me protege cada mandamiento?<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Finalmente, si el amor es el cumplimiento de la ley (Gálatas 5:14), entonces ¿qué es lo que cada mandamiento revela en cuanto al amor?<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">Creo que una vez que usted responda estas cuatro preguntas, ya nunca mirará los mandamientos de Dios con una actitud negativa. Si usted los considera desde la perspectiva apropiada, descubrirá principios que aumentarán su entendimiento de su Padre celestial, infinitamente sabio y amante.<br /><br /></span><span style="font-size: 12.16px;">¿Por qué no hace la prueba?<br /><br /><br /></span><em><span style="font-size: 12.16px;">Luis Palau<br /></span></em><em style="font-size: 12.16px;">Asociación Luis Palau</em></p> <p><br /><br /></p>